Leshan

Al dia siguiente voy a ir a Leshan, asi que compro el billete. Leshan está a una distancia y tiempo similar que la de Chengdu a Dazu. Sale puntualmente a las 7:20, pero se detiene al poco para recoger a mas pasajeros. 5 horas y media mas tarde llego a Leshan. Otra vez me tocará hotel chino. Esta vez con el añadido de desayuno a la China, que apenas pruebo. Comer picante por la mañana temprano no es mi idea de un buen desayuno. Así que paso y compro fruta en un puesto callejero.
Desde mi llegada no veía el sol, pero hoy parece querer presentarme al Gran Buda dorado por sus rayos. Los barcos que navegan por el rio y se detienen frente al Buda no permiten desembarcar al pasaje, así que busco el modo de alcanzar la colina en la que se apoya. Un autobús me deja al pie de la entrada norte. Todas estan situadas en la parte posterior, justo a la espalda del Buda y de los dos rios que confluyen a sus pies y limitan el crecimiento de la ciudad. No sólo Dafo (el Gran Buda) es impresionante sino su emplazamiento. Con sus 70 metros de altura, se considera la estatua esculpida en piedra mas grande del mundo. El mas pequeño de los dedos del pie permite sentarse en él a una persona. Esta sentado, recuerda en su postura a las esculturas del templo de Asuan. Mira al rio, con la ciudad a sus pies y en la lejanía al Monte Emei, una de las montañas sagradas de China. Desde 1996, junto con los paisajes de este último, es Patrimonio de la Humanidad. Su construcción data de inicios del siglo VIII, tambien bajo la supervisión de un monje, aunque fueron sus discípulos los que lo terminaron 90 años mas tarde.Se esperaba que controlara la turbulencia de las aguas, sus inundaciones protegiendo asi a los barcos. Una explicación mas científica del éxito de tal empresa podria ser que los desechos de piedra de su construcción quedaron en el fondo del rio, domando asi su corriente. Como en Dazu, se incorporó un sistema de drenaje que ha protegido su erosión hasta nuestros dias. A su derecha una escalera conecta la parte superior, sobre su cabeza con la plataforma donde descansa el pedestal, llamada de las Nueve Vueltas, tambien del siglo VII. La que hoy dia se utiliza para volver a ascender, es de los 80 del pasado siglo. La mole rocosa esta sembrada de templos que fueron construyendose poco despues. El paseo por la montaña y la visita de los mismos es un agradable paseo. La fe que algunos chinos ponen en tales peregrinajes es digna de encomio. He adoptado a una “mama”, encantadora viejecita que ha descendido con dos mujeres, quiza sus hijas o nueras. Me pregunto como conseguiran hacerla subir de nuevo. De momento, sonrie feliz ante la cámara y me acoge para salir juntas. Por encima de la cabeza del Buda se halla un pabellón donde un poeta se retiraba a escribir y pintar. Afortunadamente está desierto cuando penetro en él y me acerco al mirador cubierto con vistas privilegiadas. Me pregunto como serian sus poemas ante la visión de la ciudad actual y la afluencia masiva de visitantes.
La prosperidad de Leshan no le ha hecho perder un carácter agradable, para pasear sin prisas.